De la introducci n Al escribir sobre un libro de la Biblia, es muy com n dedicar alg n tiempo a la introducci n, describiendo su naturaleza, circunstancias en las que fue escrito, y supuesto prop sito del autor, as como otros muchos elementos, algunos cercanos a la conjetura y otros derivados m s objetivamente del propio texto.
El lector debe aceptar todas esas declaraciones bas ndose en la palabra y autoridad de quien las expone.
Debido a ello, es preferible introducir al lector direc.